Dentro de la crisis económica actual y la cada vez más difícil tarea de encontrar un empleo, nos encontramos con la figura del responsable de RRHH, el reclutador, ese muro que hay que superar para conseguir el objetivo final. Y ante una entrevista nos preguntamos: ¿cómo será la persona que me va a entrevistar? ¿qué manías tendrá?

Ahora hay una manera de conocer a los entrevistadores: visitar sus perfiles en redes sociales. Si sabes quien te va a entrevistar, no dudes en ver qué muestra para saber con qué te vas a encontrar.

Hay tantas clases de seleccionadores como de personas, claro está. Da igual el tipo de trabajo: está el informal, el amable, el egocéntrico, el serio, la estrella…Por ello, tengamos en cuenta dos variables:

  1. Enfoque al cliente. Si no conocemos bien quién va a evaluar nuestra candidatura, no nos molestemos en intentar agradar artificialmente a dicho desconocido diciendo lo que creemos que esperan que digamos. Si decides arriesgarte, debes tenerlo muy claro. Lo que tu creas que buscan no tiene por qué coincidir con lo que la empresa realmente está buscando. Y un consejo personal: no hacer nunca la pelota; aunque hay seleccionadores que les agrada esta actitud,  es de lo menos profesional que se puede hacer en una entrevista.
  2. Sinceridad absoluta. Solemos aportar información que  no es relevante y da una imagen desafiante al seleccionador. Está bien ser uno mismo, pero no hay que arrollar como un elefante en una cacharrería.

Por lo tanto, equilibrio: Debemos aportar una imagen real de nosotros mismos, coherente y con información escogida con cuidado, cuidando de no adoptar “una pose” que en la mayor parte de los casos suele quedar en evidencia a los 5 minutos. Este mismo equilibrio es válido si te llaman para una dinámica de grupo en una selección: cuidado con el excesivo protagonismo, pero a la  misma vez cuidado con pasar demasiado desapercibido…

Si te encuentras buscando entrevistas, te deseo la mayor de las suertes.

Sandro Gonzalez es el responsable de Formación y RRHH de CXC
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